La sociedad está obligada por ley, a convocar a sus socios para celebrar asamblea mínimamente, una vez al año. A través de esta asamblea, los socios podrán discutir, aprobar o modificar el informe de los administradores, aprobar los estados financieros o nombrar al Administrador o Consejo de Administración.

El documento idóneo para ello, se llama Pactos Parasociales, a través de éste, se podrá plasmar acuerdos que por su complejidad y confidencialidad no forman parte de los estatutos sociales. Sin embargo, sentarán las bases para resolver posibles conflictos que pudieran suscitarse entre los socios, el patrimonio de la empresa y frente a terceros. Este documento ayudará a prevenir problemas futuros y garantizar la estabilidad de la empresa.

Cuando la familia es propietaria y opera el negocio, es fundamental establecer un marco claro para la relación entre la familia y la empresa. Un documento especialmente diseñado para este propósito es el «Protocolo Familiar». El Protocolo Familiar es un acuerdo que define las reglas, expectativas y roles de los miembros de la familia en relación con la empresa.  Este es un documento que busca equilibrar los intereses tanto de la empresa como de la familia propietaria. Este documento establece pautas y acuerdos que ayudan a garantizar que la empresa se gestione de manera profesional y que los valores fundamentales de la familia se conserven, lo que a su vez contribuye a la armonía y la continuidad del negocio a lo largo del tiempo.