Marcando la Diferencia: Protegiendo y Utilizando la Identidad Corporativa

Las marcas son un elemento esencial para cualquier empresa. Son signos distintivos que diferencian los productos o servicios en el mercado. Los tres tipos más comunes son: nominativas, figurativas y mixtas.
Las marcas nominativas son las formadas por palabras. Las figurativas, por otro lado, incorporan elementos visuales, como formas, dibujos o colores. Y cuando se combinan palabras y gráficos, obtenemos una marca mixta.


Imaginemos, por ejemplo, a una compañía ficticia llamada «TechNova». Su logotipo es una estrella brillante y su nombre está escrito en letras elegantes. En este caso, «TechNova» sería la marca nominativa, la estrella sería la marca figurativa y la combinación de ambas sería la marca mixta.

Clasificación inicial para TechNova

Pero ¿por qué dividir una marca en estos tres componentes? Todo radica en cómo los consumidores perciben estos signos. La marca nominativa apela al oído, la figurativa a la vista y la mixta a ambos sentidos.

Para proteger completamente «TechNova» y su estrella, la compañía necesita realizar tres registros separados: uno para el nombre, otro para el logotipo y uno final para la combinación de ambos. Cada registro otorga a «TechNova» el derecho exclusivo de usar ese signo en particular.

Aquí es donde entra en juego el uso estricto. «TechNova» debe usar sus marcas exactamente como se registraron. Si no pueden demostrar que están utilizando la marca como se registró, corren el riesgo de perderla.

También surge el debate de si «TechNova» debería registrar su estrella a color o en blanco y negro. La elección depende de cuánto aporte el color a la distintividad de la marca. Si el color es crucial, deberían registrarlo a color; si no lo es, podrían optar por el blanco y negro.

Estrategia de registro para TechNova

Al final, «TechNova» podría tener hasta cinco registros distintos: la marca nominativa, la figurativa a color, la figurativa en blanco y negro, la mixta a color y la mixta en blanco y negro. Aunque cada registro tiene un costo, el beneficio en términos de protección y valor de la marca para la empresa vale la inversión.

Sin duda, uno de los mayores beneficios de esta estrategia de registro es la protección acumulada. Cada registro, ya sea nominativo, figurativo o mixto, suma una capa adicional de defensa. En el caso de «TechNova», la protección acumulada le permite salvaguardar su nombre, logotipo y la combinación de ambos de manera independiente.

En la práctica, esto significa que si un competidor intenta utilizar un nombre, logotipo o combinación similar, «TechNova» puede tomar medidas legales en base a uno o más de sus registros. Por lo tanto, los potenciales infractores se enfrentan a la amenaza de sanciones multiplicadas, aumentando la disuasión y reforzando la fortaleza de la marca de «TechNova». Así, la protección acumulada refuerza su inversión en la marca y consolida aún más su identidad corporativa en el mercado.

En resumen, la protección y el uso adecuado de las marcas son esenciales para el éxito de cualquier negocio. Con un entendimiento claro de las marcas nominativas, figurativas y mixtas, y las normas que las rigen, las empresas pueden maximizar la protección de su identidad y consolidar su posición en el mercado.